Se utilizan técnicas dirigidas a movilizar la dimensión energética del individuo, incluyendo: la respiración; la autopercepción; la expresión emocional y el dominio de sí mismo; el movimiento espontáneo. También se incluyen ejercicios de contacto físico, de límites, de enraizamiento, y de comprensión de las tensiones musculares, considerándolas indicadores de defensas somáticas y psicológicas contra traumas pasados.
El terapeuta y la persona en terapia progresan juntos en el entendimiento de esa lucha interna entre los miedos y el deseo de superar las limitaciones en la vida.
El fin de la terapia va mas allá de la ausencia de síntomas, es estar enraizados en la vida desde nuestro self más genuino, pudiendo habitar nuestro cuerpo con una mayor vitalidad para transitar los desafíos de la vida.
Robert Lewis, M.D, miembro del equipo de formadores del IIBA, describe su misión como terapeuta:
«Cuando no tienes palabras para tus sentimientos, para lo que te pasó, para lo que te falta, escuchamos la resonancia interna – de tus secretos incipientes -, ya que vive en tu cuerpo. Te ayudamos a sentir y a amplificar esa resonancia interna hasta que su movimiento se acerca lo suficiente a la superficie de tu ser para entrar en tu consciencia. Pero también escuchamos cuidadosamente tus palabras y nos emocionamos cuando vienen de la profundidad de tu ser, a la que nadie puede llegar. Te invitamos a rendirte al espíritu de tu cuerpo y al cuerpo de tu espíritu – y haciéndolo así, acogerte a ti mismo.»
Para más información sobre psicoterapia individual puedes ponerte en contacto con uno de nuestros Terapeutas y solicitar una primera entrevista. Consulta la lista de miembros de nuestra asociación.